Los móviles altos de gama como los iPhone 6S, Samsung Galaxy S7 y similares incorporan en sus últimas versiones la estupenda característica de ser resistentes al agua. En algunos casos con esto buscan específicamente que los uses para sacar fotos subacuáticas, pero en muchos casos lo que persiguen es que estos dispositivos tan caros te duren y aproveches tu inversión: por eso los hacen también muy resistentes a caídas, golpes en la pantalla, etc... Imagínate que te olvidas tu móvil de 900€ en el bolsillo de los pantalones y los metes en la lavadora :-O (Ríete si quieres, pero ya hemos visto algunos casos cercanos...).
Como los grandes hacen sus móviles resistentes al agua, algunas marcas con móviles de gama media (o incluso baja) se quieren apuntar a la moda y dicen que los suyos también lo son. Otros, como Apple, a pesar de tener esta característica ni siquiera la anuncian, por lo que no sabemos qué valor de resistencia al agua tienen sus terminales, aunque viendo lo que hacen algunos en YouTube suponemos que muy alto.
Si compramos un móvil y nos dicen que es sumergible deberían facilitarnos un dato muy importante: el código IP.
Este código consiste en las siglas IP seguidas de dos números. Por ejemplo, IP68, y deberían indicarlo en las especificaciones técnicas del dispositivo. Si no lo indica pregúntaselo al fabricante.
Por ejemplo, el Samsung Galaxy S7 tiene IP68 (PDF), y otros móviles baratos chinos tienen IP54 a pesar de su aspecto "duro".
Veamos qué significan esos códigos...
El código de protección internacional
Las letras IP que van delante del código significan Ingress Protection, o protección contra la entrada ya que se refiere a la entrada no solo de agua sino de otros elementos.
Se trata de un estándar internacional, concretamente el ANSI/IEC 60529 (PDF, 673KB), y lleva aprobado desde el año 2004, aunque sea ahora cuando se empieza a conocer entre el gran público.
Sirve no solo para móviles y otros aparatos electrónicos, sino también para enchufes o cables de corriente, por ejemplo.
Refleja el grado de protección de un dispositivo contra elementos físicos, polvo y agua. La idea es que cuando compremos un aparato resistente al polvo o al agua sepamos cuánto de manera cuantificable, y no recibamos un simple "resistente al agua" o "impermeable".
Aunque por regla general los veremos solamente con 2 números el estándar en realidad define 4 elementos, lo que ocurre es que uno de ellos es opcional y el otro ya no se usa:
- Protección contra partículas sólidas (polvo)
- Protección contra el agua
- Resistencia al impacto mecánico (golpes). Ya no se utiliza.
- Otras protecciones (lleva letras). Es opcional y raramente se ve.
Protección contra el polvo
El primer número indica la protección contra partículas sólidas, lo que generalmente se refiere, en el caso de los móviles, a protección contra el polvo.
Los valores son los siguientes:
- 0: sin protección de ningún tipo frente a introducir objetos. En un enchufe, por ejemplo, esto es importante. En un móvil no tiene mucho sentido porque no puedes meterle dentro nada.
- 1: >50mm: o sea, impide que entren objetos grandes pero podrías meter los dedos o la mano. Nuevamente en un móvil no se usa.
- 2: >12.5mm: podrías meter los dedos dentro.
- 3: >2,5mm: le entran herramientas, cables gordos, etc...
- 4: >1mm: entrarían sin problema cables normales o insectos. La mayor parte de los móviles sin protección alguna tendrían este número.
- 5: Protección contra el polvo: no se impide por completo la entrada del polvo, pero sí en gran medida, por lo que si tenemos que usar el móvil en un entorno con suciedad y pequeñas partículas en suspensión (un aserradero) no deberíamos tener problema.
- 6: Protección completa contra el polvo: un móvil con este nivel de protección tiene hecho el vacío dentro y puede trabajar en entornos con polvo (o ser sumergido en arena, por ejemplo) sin ningún problema. Podría estar así hasta un máximo de 8 horas.
Protección contra líquidos
Todo el mundo sabe lo mal que se llevan la electricidad y el agua. Bueno, todo el mundo... digamos que no:
;-)
El resto de los mortales sí que saben que cuando un aparato electrónico toca el agua, generalmente es una sentencia de muerte para éste.
El segundo dígito del código IP sirve para indicar la capacidad que tiene el aparato para soportar el contacto con líquidos. Sus valores son más amplios que los anteriores, a saber:
- 0 - Sin protección: lo dicho, mejor que no lo toque ni una gota.
- 1 - Gotas verticales: prácticamente ninguna protección. Sería capaz de soportar 10 minutos de una lluvia casi imperceptible de 1mm de agua por minuto.
- 2 - Gotas con ángulo de 15º: igual que el anterior, pero pudiendo inclinar el aparato hasta 15º sobre su posición normal durante 2 minutos y medio.
- 3 - Agua pulverizada: agua pulverizada, con poca presión (menos de 1 atm).
- 4 - Salpicaduras: el aparato es capaz de resistir salpicaduras recibidas desde cualquier sitio sin problemas para funcionar.
- 5 - Chorros de agua: se le pueden dar chorros de agua con poco caudal (12,5 litros/min) y a poca presión (30Kpa, menos de 1/3 de una atmósfera) a 3m de distancia durante al menos 3 minutos. Es una resistencia bastante buena y en el caso de un móvil nos sirve para estar tranquilos de que aunque se nos caiga en la piscina durante unos segundos no le va a pasar nada.
- 6 - Chorros de agua potentes: es igual que el anterior pero con chorros de agua mucho más intensos de 100 litros/minuto y 100Kpa (casi a presión atmosférica).
- 6X - Chorro de agua extra-potentes: es como el anterior pero con menos caudal (75 l/m) pero mucha más presión (1000 KPa, o sea, casi 10 atmósferas). Es una mayor protección que la anterior, capaz de soportar mayor profundidad.
- 7 - Inmersión hasta 1m: el aparato puede estar bajo el agua con hasta 1 metro de profundidad durante media hora sin problema.
- 8 - Inmersión a más de 1m: el aparato se puede sumergir durante media hora a más de 1m (la profundidad exacta la debe indicar el fabricante) sin que le pase absolutamente nada.
- 9K - Chorros potentes de agua caliente: esta es una categoría especial que no viene en la norma IEC y que fue añadida por DIN (el regulador alemán). Garantiza la resistencia a chorros de agua caliente.
De esta manera es muy fácil comprobar la protección que realmente nos ofrece el móvil y saber si es adecuada para el uso que le queremos dar o no.
Ejemplos
Por ejemplo, el Samsung Galaxy S7 Edge o el Sony Xperia Z3 tienen un IP68, esto quiere decir que está sellado contra el polvo y la suciedad y que además podemos sumergirlo en el agua más de 1 metro (según Samsung hasta 1,5m) hasta media hora, siempre y cuando sea agua dulce. Si lo metemos en una piscina con cloro de vez en cuando tampoco hay problema mientras lo lavemos con agua dulce nada más sacarlo. Por supuesto podríamos usarlo bajo lluvia intensa, en un barco, con las manos mojadas, etc... sin agobiarnos demasiado.
Sin embargo nuestro amigo el móvil chino con aspecto de aparato todo-terreno, con su protección IP54 lo que nos dice es que soportaría que lo usásemos en un ambiente con polvo, pero no está sellado así que parte va a acabar dentro seguro, aunque no lo dañará. Ahora, mejor que no lo entierres en la arena de la playa este verano. Además su resistencia al agua solo cubre salpicaduras o asomarlo un instante si llueve, así que quizá meterlo a la piscina no sea una buena idea tampoco.
La mayoría de los móviles sin protección especial serían IP43 o IP44, así que si te "venden la moto" del móvil resistente al polvo y al agua con esos números, te están tomando el pelo.
Consejos
Debemos tener cuidado con las indicaciones vagas estilo "resistente al agua" o "impermeable". Que te digan siempre el código IP o no les creas. Lo otro es como no decir nada. Ahora bien, si te dicen "resistente al agua" lo más probable es que soporte salpicaduras como mucho. Si dice "impermeable" es probable que lo puedas sumergir o al menos usar bajo la lluvia sin problema, pero si es así con toda seguridad pondrá el código IP en las especificaciones del móvil. Eso o te están mintiendo.
Tampoco debemos fiarnos de móviles que indiquen el código IP en un formato no estándar, estilo IP-65 (lleva un guion que no debiera estar). Una marca seria no usará ese formato, ya que no es válido y puede que estés ante un producto fraudulento.
Finalmente otro detalle importante: la escala de resistencia al agua no es acumulativa en todos los casos.
Es decir, por ejemplo, el hecho de que un móvil soporte inmersión en agua no quiere decir que vaya a aguantar chorros de agua a alta presión.
O sea, puede ser IP68 porque lo puedes meter en el agua, pero no ser IP65 y si le das un "manguerazo" con la hidro-limpiadora te lo cargas.
Cuando el aparato soporta chorros y además inmersión generalmente lo indica con ambos códigos separados por una barra. Por ejemplo, el Sony Xperia Z3 indica que su protección es IP65/IP68, esto quiere decir que soporta tanto chorros a alta presión como inmersiones en agua. El Samsung S7 Edge, sin embargo, solo informa de la capacidad de ser sumergido, así que cuidado con otras acciones agresivas con agua.
Ya sabes: si tienes la suerte de contar con un móvil resistente al agua, disfrútalo este verano en la piscina, pero tampoco lo maltrates :-)